Según informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés), con sede en Miami, la tormenta tropical Iota se convirtió en huracán durante la madrugada del domingo 15 de noviembre, representando una nueva amenaza para Nicaragua y Honduras, recientemente afectados por el ciclón Eta.
Ciudad del Vaticano
Centroamérica se prepara para el paso de Iota: una tormenta tropical que se ha convertido en huracán después de que sus vientos se reforzaran la madrugada del domingo 15 de noviembre, representando una nueva amenaza para Nicaragua y Honduras, recientemente afectados por el ciclón Eta.
Según informa el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés), con sede en Miami, “Iota es la tormenta número 30 en esta extraordinariamente activa temporada de huracanes en el mar Caribe, que debería finalizar el próximo 30 de noviembre”.
Nicaragua y Honduras se preparan para el nuevo huracán
Asimismo, el NHC, afirma que Iota ha alcanzado una categoría 4 muy fuerte con vientos sostenidos de 249 km/por hora y tiene su centro a unos 475 kilómetros al este de la isla de Providencia, en Colombia. Por tanto, está previsto que entre a Nicaragua y Honduras en poco tiempo por la cual estos países ya están en alerta, especialmente teniendo en cuenta las las graves consecuencias del último huracán, Eta, que dejó millones de damnificados.
Huracán Eta: uno de los peores desastres naturales
Tal como informaron medios oficiales, Eta cruzó hacia el norte de Nicaragua el 3 de noviembre como un huracán de categoría 4, azotando ese país junto con Honduras, Guatemala y Belice durante días con fuertes lluvias.
Todavía no se ha podido realizar un balance total del daño causado por Eta, pero el poder de esta tormenta sumado con los estragos que ha causado la actual pandemia de coronavirus, se registra como “uno de los peores desastres naturales que ha azotado la región”.
“Más de 3,6 millones de personas en Centroamérica se han visto afectadas por el huracán Eta en diversos grados”, aseguró la Cruz Roja a principios de esta semana. Incluso antes de la tormenta, Nicaragua, Honduras y Guatemala luchaban contra sus sistemas de salud pública deficientes que se han visto desbordados a causa del Covid-19.
“Con miles en refugios y el distanciamiento social difícil de cumplir, muchos temen que el Covid se propague. Los hospitales allí también enfrentan, en este momento, la carga de combatir otras enfermedades relacionadas con la tormenta y las inundaciones, desde el dengue hasta el cólera y la fiebre amarilla”, informa la agencia Deutsche Welle (DW) en su sección sobre América Latina.
Iota se está fortaleciendo
Por su parte, centrándonos en el nuevo huracán Iota, hasta el próximo miércoles se espera que produzca lluvia en el norte de Colombia, Panamá, Costa Rica, Jamaica y el sur de Haití.
“En Centroamérica, el sistema tiene el potencial de producir de 20 a 30 pulgadas (508 a 762 mm) de lluvia, especialmente en el norte de Nicaragua y Honduras, donde podrían producirse inundaciones repentinas significativas y desbordes de ríos y deslizamientos de tierra”, añade el Centro Nacional de Huracanes. Se espera, por tanto, que este nuevo huracán “traiga vientos catastróficos, marejadas ciclónicas potencialmente mortales e impactos de lluvias extremas en América Central”, según el NHC. Se trata de una noticia desalentadora, teniendo en cuenta de que la misma región fue duramente golpeada por el huracán Eta, también de categoría 4, hace menos de dos semanas.
Fuente: Vatican News