La universidad jesuita en Guatemala lleva el nombre de uno de los grandes poetas del barroco latinoamericano. Conozca más detalles de la vida del jesuita Rafael Landívar, un hombre comprometido con literatura y cultura de su país.
Por Comunicaciones PROCAM
Rafael Landívar es considerado como uno de los grandes poetas del barroco latinoamericano. Es considerado, también, como uno de los poetas más importantes de Guatemala, y recordado por su contribución a la literatura y la cultura de su país: su pensamiento independentista está presente en su obra, que mostraba, por primera vez, la identidad de las regiones centroamericanas. Su libro, Rusticatio Mexicana, constituye “la más universal de las poesías guatemaltecas” del siglo XVIII.
Landívar nació en Santiago de los Caballeros, Guatemala, el 27 de octubre de 1731. La casa de su infancia estaba ubicada frente a la iglesia y convento de la Compañía de Jesús de esa ciudad. A los once años inició su formación académica en el Colegio Mayor Universitario San Borja, conocido también simplemente como Colegio Jesuita. Antes de cumplir 15 años, en 1746, ya era bachiller en filosofía por la Real y Pontificia Universidad de San Carlos Borromeo.
Luego de recibir los grados de licenciado en filosofía y maestro, Landívar se unió a la Compañía de Jesús en 1749, estudiando en diferentes instituciones de la orden en América y Europa, incluido el Colegio Romano en Italia. Fue ordenado sacerdote en 1755 y pasó gran parte de su vida enseñando filosofía, teología y humanidades en distintos colegios de la orden.
Académicos e historiadores coinciden en que la Rusticatio de Landívar está dedicada a Guatemala por expresar el sentimiento de maravilla por la tierra patria a través de las descripciones y referencias a elementos como el paisaje, el clima, la hidrografía y la vegetación. Y es a través de estos sentimientos, que se basan en el arraigo y en la contemplación, que concluyen que la obra de Landívar buscaba expresar un carácter identitario bien definido para la región mesoamericana.
En 1767, luego de la expulsión de los jesuitas de los territorios españoles, Rafael Landívar tuvo que abandonar su natal Guatemala y trasladarse hasta Italia, en donde residió hasta el final de sus días. Murió en Bolonia el 27 de septiembre de 1793.
En 1949, la Facultad de Humanidades de la Universidad de San Carlos de Guatemala fundó un Seminario de Estudios Landivarianos para profundizar en la obra del poeta jesuita. Luego de que en 1931 iniciaran las investigaciones para localizar sus restos, estos llegaron a su país natal en 1950, procedentes de Santa María delle Muratelle. Este año, entonces, se declaró como “Año Landivariano” en homenaje al retorno de sus restos.
Rafael Landívar dejó un legado indiscutible en la literatura y la cultura latinoamericana. La Compañía de Jesús en Centroamérica reconoció su aporte y su labor bautizando a la universidad jesuita guatemalteca en su honor. Desde 1961, la Universidad Rafael Landívar brinda educación profesional integral con especial inspiración en el carisma ignaciano.
Actualmente, La Landívar, como popularmente se conoce a la institución, es reconocida por su compromiso con la excelencia académica, la formación integral de sus estudiantes y su misión de contribuir al desarrollo social y humano del país. Al igual que el poeta jesuita que le da nombre, la Universidad Rafael Landívar busca sentar constantes precedentes en la educación profesional guatemalteca y latinoamericana a través de la excelencia académica y los valores jesuitas.