Superior General: “Tenemos que ser mensajeros de la esperanza”
Luego de su participación en el MAG+S 2019, celebrado recientemente en Panamá, el P. Arturo Sosa Abascal, S.J., Superior General de la Compañía de Jesús, visitó Nicaragua los días 23 y 24 de enero para sostener un encuentro con jesuitas y laicos que colaboran con las obras de la Compañía en este país, para discutir temas fundamentales sobre su misión, especialmente en contextos adversos.
En su visita, el P. Sosa –de origen venezolano y primer latinoamericano en ser elegido como Superior General-, reflexionó sobre el papel de la Congregación General 36 (de la cual resultó su nombramiento): “Se nos quedó eso de la fe y la justicia de la Congregación 32, las cuales requieren un esfuerzo grande de diálogo intercultural e interreligioso. Esta Congregación recoge todo eso en la palabra Reconciliación. En primer lugar, la reconciliación entre seres humanos. (…) También hemos crecido en la conciencia de la injusticia que estamos haciendo a la naturaleza, con cómo estamos amenazando el planeta tierra. (Por tanto) hablamos de reconciliación con el medioambiente. Y está la reconciliación con Dios”.
Para el Superior General, la fe y la esperanza son motores clave del cambio. “El Señor lo que quiere para nosotros es una vida feliz, una vida donde cada quien pueda desarrollar su personalidad, donde todos tengan seguridad, donde haya no solamente pan y casa, sino también un ambiente de enriquecimiento mutuo. La esperanza es la virtud que te impulsa a hacer lo que tú esperas, a no quedarte en el suelo. Si queremos contribuir de verdad a la reconciliación, tenemos que ser mensajeros de la esperanza. Necesitamos como pueblos una inmensa esperanza para movilizarnos en la dirección de eso que ahorita nos parece imposible, pero que es posible si nuestra fe en Dios se mantiene fuerte y se profundiza”, expresó.
Los jóvenes, uno de los compromisos más grandes de la Compañía de Jesús
En su visita, el P. Sosa recordó que el catolicismo (lo universal) es una manera de expresar humanamente el rostro de Dios, un rostro humano multicultural. “La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) representa precisamente esa diversidad. Yo participé en la clausura del MAG+S (experiencia que precede la Jornada), donde participaron jóvenes de más de 40 naciones que no tenían una lengua común, que no perciben las cosas igual y la experiencia los unió de una manera hermosa”.
El MAG+S 2019 y la JMJ no son actividades aisladas. Por el contrario, son parte del esfuerzo de acompañamiento a jóvenes que ofrece el apostolado de la Compañía de Jesús. “La Compañía tiene un compromiso muy grande con la educación a todos los niveles del sistema y a todos los niveles sociales. Tiene una gran parte de sus recursos puestos en ese contacto diario con los jóvenes”, compartió el P. Sosa.
Desde la perspectiva del Superior General, uno de los principales aciertos de la Compañía de Jesús en su trabajo con jóvenes ha sido precisamente su capacidad de sintonizar con el mundo juvenil y de aprender de ellos como parte de un proceso basado en el respeto, el compromiso y entrega a los demás; y la búsqueda de un mundo más justo.
La estancia del P. Sosa en Nicaragua incluyó una breve visita a la Universidad Centroamericana y concluyó con la celebración de una eucaristía en el Colegio Centro América, en la que enfatizó en la necesidad de agudizar nuestra capacidad de análisis y de mejorar el olfato para el discernimiento. “El análisis es necesario, pero no basta. También tenemos que desarrollar la sensibilidad para saber cuál es la ruta que nos lleva por el camino de la liberación o de la superación de la injusticia que nos aplasta”, exhortó el Superior General, haciendo referencia a diversas realidades que se viven alrededor del mundo.
Algunas impresiones sobre el mensaje del Superior General de la Compañía de Jesús, P. Arturo Sosa Abascal, S.J.
Rolando Alvarado – Provincial de los Jesuitas para Centroamérica: “Estamos muy contentos con la vista del Padre Arturo Sosa que ha querido aprovechar la clausura de la experiencia MAG+S en Panamá para visitar a los seis países que integramos la provincia para animarnos y orientarnos. En la homilía nos habló sobre la necesidad del discernimiento, que es percibir qué es de Dios y qué no. No es de Dios para Centroamérica todas las dinámicas de violencia, de destrucción familiar, de desesperanza personal, de injusticia, de no garantizar los Derechos Humanos. Las 41 obras que llevamos los jesuitas en Centroamérica hacemos eco de ese mensaje día a día con nuestro mejor esfuerzo”.
José Alberto Idiáquez – Rector Universidad Centroamericana: “La visita del P. Arturo Sosa es muy oportuna en estos momentos que estamos viviendo en Nicaragua. Nos viene animar para que sigamos con nuestro servicio a la fe y la promoción de la justicia. Un compromiso que tiene que ser sencillo. El Superior General nos invita a seguir trabajando en red con todas las universidades centroamericanas, con las parroquias e instituciones jesuitas en Latinoamérica y el mundo, porque somos un cuerpo universal. Es importante que los jesuitas nos sintamos como un solo cuerpo, como amigos en el Señor. También vino a animar a las personas que trabajan con nosotros, a la familia ignaciana, para continuar en este desafío con todas las adversidades e incertidumbre”.
Julio Flores Coca – Gerente General de FDL: “Esta eucaristía es un evento histórico. El llamado que el P. Sosa nos hace a los laicos es a tener presente el mensaje de Jesús y no desviarnos de nuestra misión, que es trabajar por las personas más humildes y por la justicia”.
Lea Montes – Directora del Servicio Jesuita para Migrantes: “La visita del Superior General nos trae una luz de esperanza en estos momentos difíciles. El Padre Sosa nos invita a ser empáticos con todas las personas que están sufriendo, con todos los pueblos que están luchando por la libertad y la democracia. Y, sobre todo, nos invita a que siempre acompañemos a los más necesitados, a los que no tienen voz”.