Respuesta del P. Adonai Cortéz sj,
también acusado de "carbonear" la situaciòn de la Comarca.
Lo que veo al día de hoy: Un país convulsionado y la opinión pública convencida de que la violencia solo genera violencia.
Se logró la liberaron de los extranjeros, se despejaron las vías, pero el problema y la explosión social está aún allí.
La desacreditación y el irrespeto dejaron a las claras que falsear la verdad hace que ella se vaya abriendo camino en el contraste con la realidad. Al fin y al cabo la verdad no se defiende, ella se defiende sola.
Seguimos incomunicados. Esta claro que la libertad ha sido vulnerada, se ha pensado que el silenciar la comunicación les dejará decir "su" palabra, olvidando que una mentira a medias es también una verdad a medias.
Si hay grupos infiltrados en un movimiento popular indígena y con eso se quiere decir que no es un movimiento de un grupo humano que no entiende el desarrollo y el progreso en términos económicos y se duda de su capacidad de tomar decisiones por si mismos, es lo menos, irrespetuoso.
Un grupo indígena que se va fortaleciendo en su decisión de no querer ser objeto de su historia, sino que quiere tomar sus recursos y su destino, como algo de lo cual ellos son dueños y tienen derecho a su autodeterminación.
Que Jesús sea nuestra compañía y con El podamos hacer que nuestra fe nos lleve a buscar la justicia que haga verdad lo que Jesús mismo dijo: "quien dice que ama a Dios al que no ve y no ama a su hermano al que ve, miente".
P. Adonaí, s.j.
Panamá
(Monseñor Lacunza, de la diòcesis de David, defiende al Padre Adonai de la acusaciòn de "carbonear" la situaciòn en http://www.prensa.com/impreso/panorama/lacunza-cuenta-lo-que-paso/62935 )