Obras y aliados de la Compañía de Jesús en Centroamérica que trabajan con personas migrantes y refugiadas participaron en encuentro desde la dimensión socio pastoral para reafirmar el compromiso de acompañar a estas poblaciones en el contexto actual centroamericano.
Por Norma Hernández, coordinadora de RJM-CA – Comunicaciones PROCAM
Obras y aliados de la Red Jesuita con Migrantes de Centroamérica que trabajan en la atención directa a personas migrantes, refugiadas y desplazadas y sus familiares participaron en un encuentro para compartir las experiencias y dinámicas de acompañamiento desde la dimensión socio pastoral de la red.
Entre el 24 y el 27 de junio, las y los participantes compartieron sobre la situación sobre las políticas migratorias, principales flujos, y la respuesta que cada una de las obras se encuentra dando a la realidad de las personas en situación de desplazamiento; pero también a las familias desde la organización de comités y acompañamiento a grupos de niños, niñas y adolescentes como de mujeres.
Algunas de las obras participantes fueron el Servicio Jesuita para Migrantes de Costa Rica, la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), de El Salvador, la Parroquia de Arcatao, Fe y Alegría El Salvador, el Comité de Familiares de Migrantes de El Progreso, El Comité de Migrantes Desaparecidos, el Equipo de atención integral Casa Myrna Mark de Guatemala, Asociación de Desarrollo Social ADESI, el Bufet de la Universidad Rafael Landivar, Jesuitas de Belice entre otros, este año además se sumaron dos obras hermanas de norte américa: el JRS de Tapachula/ Frontera Comalapa y el JRS de Estados Unidos.
Otro de los temas centrales fueron las experiencias compartidas que algunas mujeres de iglesia se encuentran liderando en la región, como es el proceso de atención a migrantes retornados que realizan las Hermanas Escalabrinianas en Honduras, la atención a migrantes en tránsito que varias religiosas realizan en la casa Mirna Mark junto al equipo de la RJM Guatemala, así como la experiencia de organización con otras iglesias desde la red Humanitaria Local en Paso Canoas, donde son las mujeres las que lideran la solidaridad que se vive con los migrantes que vienen desde el sur y pasan por Costa Rica, así mismo desde la coordinación de la RJM para Centroamérica pude compartir el compromiso que como religiosa llevo adelante en el trabajo de articulación desde los valores que nos mueven como obra de la Compañía de Jesús.
En este sentido, la Compañía de Jesús en Centroamérica, en alianza con obras y organizaciones hermanas, busca seguir apostando por un trabajo de acompañamiento desde el cuidado con un enfoque multidimensional que tenga en cuenta no solo lo personal, sino lo colectivo, grupos en condiciones de vulnerabilidad como lo son las mujeres, los niños, niñas y jóvenes. También sigue siendo una prioridad el contar y compartir información actualizada sobre las rutas, casas de atención y colectivos que brindan servicios en los distintos países para la acogida de personas que se movilizan en la región.
