La iniciativa surgió en Estados Unidos a finales de los 90 como un programa de prevención de riesgos en adolescentes. Actualmente, funciona en países latinoamericanos como una adaptación que apuesta a la prevención de la violencia en los núcleos familiares. En Centroamérica, Fe y Alegría impulsa y desarrolla el programa en alianza con otros actores de la sociedad civil, cooperación internacional y de inspiración cristiana.
El programa “Familias Fuertes” surgió como una iniciativa original de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en 1996. La finalidad era emprender acciones preventivas de salud, consumo de sustancias y conductas de riesgos en adolescentes entre los 10 y los 14 años. El programa estaba orientado a jóvenes y sus progenitores o tutores a partir de la adaptación de una propuesta original de la Universidad Estatal de Iowa en Estados Unidos.
Años después, organizaciones y entidades de inspiración cristiana o dedicadas a la promoción de la educación impulsaron y promovieron el desarrollo y la adaptación de esta metodología en países del centro y del sur de América. En el caso de El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y México, “Familias Fuertes” también apuesta por la prevención de la violencia en los núcleos familiares.
Familias Fuertes funciona actualmente, entonces, como una adaptación del programa del mismo nombre que la OPS impulsó a finales de los años 90. En El Salvador, por ejemplo, funciona con la meta de prevenir violencias y conductas de riesgo en las familias a través de la promoción de una comunicación horizontal, asertiva y afectiva entre sus miembros adultos (padres, madres, cuidadores y otros familiares) y los miembros jóvenes y adolescentes (sobre todo), fomentando un entorno armónico de protección y desarrollo, de acuerdo con el sitio web de Caminando hacia la paz.
La adaptación del programa para su uso en la construcción de paz es fruto de la colaboración entre Fe y Alegría, Cáritas El Salvador, Catholic Relief Services (CRS) y la misma OPS, entidad afiliada a la Organización Mundial de la Salud (OMS). En la actualidad, Fe y Alegría en Centroamérica continúa con el desarrollo del programa en comunidades y sectores de alta vulnerabilidad. Está dirigido a miembros de diversos tipos de familias, que abarcan padres de familia, tutores, cuidadores o adultos significativos y jóvenes entre los 10 y 26 años de edad.
Las jornadas formativas de Familias Fuertes en El Salvador tienen como objetivo la capacitación de padres de familia y tutores para el fortalecimiento de vínculos familiares mediante el desarrollo de habilidades que promuevan el establecimiento de límites claros, el respeto y el amor en el entorno familiar. Todo esto con un especial énfasis en la importancia de una comunicación asertiva con el fin de seguir apostando por la educación popular en todas sus dimensiones comprometida con el acompañamiento con las poblaciones más vulnerables y excluidas.