En 1914, tras 20 años de ausencia en Centroamérica, los jesuitas llegan a El Salvador y desde ahí se extenderán al restó de países. 23 años más tarde, en 1937, Panamá es anexada a la región y queda constituida la Viceprovincia Centroamericana, dependiente aún de la Provincia de Castilla. A partir de entonces se sentaron las bases de la actual provincia.