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La misión común Jesuitas de América Latina y el Caribe a 25 años de la fundación de la Conferencia de Provinciales Jesuitas

 

Queridos jesuitas, queridos compañeros y compañeras en la misión, amigos y amigas en el Señor:

Saludamos desde el Centro de Espiritualidad Loyola, en San Miguel, Argentina. Acudimos convocados por la misión común y el Señor de la mies. Desde hace 25 años, los provinciales nos reunimos como comunidad que impulsa la misión jesuita en la región. Estamos profundamente agradecidos por tanto don recibido en lo que ustedes hacen a lo largo y ancho de nuestro territorio.

Queremos agradecer la hospitalidad y acogida de la Provincia ARU, que nos hizo más fácil la tarea y nos permitió conocer mejor su misión y el contexto en el que la hacen.

Del mismo modo, estuvimos atentos a Haití. Su superior regional, Jean Dennis SJ, se hizo presente a través de una nota en que nos comunicó su situación y lucha por la esperanza.

Estos días se centraron principalmente en la deliberación sobre nuestra misión común, su planificación y el cuidado de quienes la llevan adelante impulsados por el Espíritu. Tuvimos tiempo para algunas consideraciones específicas:  la normativa sobre pobreza religiosa con la participación del P. Jeerakassery SJ, ecónomo general; la Red de Oración del Papa con la participación de Frédéric Fornos SJ, Bettina Raed y Cristóbal Fones SJ; una presentación de Agbonkhianmeghe E. Orobator, S.J. Decano de Jesuit School of Theology-Santa Clara University; y con la reflexión sobre el trabajo que hacen nuestros centros de espiritualidad y su articulación regional.

Pero como les decíamos al comienzo fue la misión común en la región, su planificación y organización, el tema central de nuestro encuentro en el marco del 25 aniversario de la Conferencia de Provinciales. Nos fue presentada una evaluación en torno a los tres ejes fundamentales:

  • La experiencia espiritual, principalmente en el acompañamiento de comunidades diversas en su vivencia de los Ejercicios y otras iniciativas pastorales.
  • La amistad social tanto acompañando a las comunidades y grupos más golpeados, como en el esfuerzo de incidencia por una ciudadanía consciente y comprometida.
  • La formación integral en un continuo educativo que abarca desde la primera instancia educativa, hasta la educación superior y la formación a lo largo de la vida.

Son las prioridades de nuestro proyecto apostólico común y, con diversas formulaciones y medios, atraviesan las planificaciones apostólicas de las provincias. Específicamente, se pidió al delegado de Formación de la CPAL presentar una propuesta de proceso de discernimiento sobre la formación de jesuitas en la Región.

También abordamos la organización y valoración de las articulaciones lideradas por la propia Conferencia de Provinciales (como redes y otros grupos de trabajo). Nos parece que estas ayudan en tres objetivos:

  • fortalecer en la identidad y misión jesuita de las instituciones locales;
  • la respuesta con un solo corazón a la misión supraprovincial;
  • la deliberación sobre la reestructuración del gobierno jesuita en la región.

Esperamos que un estudio pedido a la UNISINOS, en el que muchos de ustedes participan, nos aporte luz sobre el estado, la organización y resultados de estas articulaciones.

Al conmemorar los 25 años de CPAL, sentimos la llamada a la ternura inteligente del Sagrado Corazón, para seguir en el discernimiento de los signos de los tiempos que hacemos en Compañía de Jesús

 

Provinciales Jesuitas de la Compañía de Jesús en América Latina y el Caribe

San Miguel, 10 de mayo de 2024