Esta Navidad 2020 hay mucha gente que nos va a necesitar cerca, más cerca que nunca. Es por ello que Cáritas España invita a realiza gestos gratuitos que ayuden y mejoren la vida de otras personas, que sirvan para aliviar la soledad y la tristeza, para cuidar y acompañar y para hacer la vida más plena y feliz para todos. Sal de tus fronteras y colabora con Cáritas.
Anna Poce – Ciudad del Vaticano
En esta época de pandemia y distanciamiento físico, Cáritas España, con motivo de su tradicional campaña navideña, bajo el lema “Esta Navidad, más cerca que nunca”, propone a los católicos vivir el tiempo de Adviento recuperando su cercanía, con gestos generosos ofrecidos a quienes más lo necesitan, a quienes se enfrentan a condiciones precarias debido a la pandemia y que cada día acceden a los recursos de Cáritas para satisfacer sus necesidades básicas: familias sin recursos, las personas mayores que viven solas, las personas sin trabajo, las personas que viven en la calle y que no pueden refugiarse en el calor de sus hogares, las que se enfrentan al dolor de la pérdida de un ser querido, las que han perdido sus medios de vida debido a la pandemia y las que son migrantes.
Cáritas, recordando que cada año la Navidad es una oportunidad para salir “de nuestro letargo y nuestro repliegue en nosotros mismos”, invita a los católicos a ser como una “estrella que con su luz ilumina la esperanza a través de gestos generosos y sencillos que facilitan el encuentro, el diálogo y las oportunidades”, y sugiere una serie de gestos concretos que podrían hacer que esta Navidad fuera verdaderamente diferente.
Cáritas España propone esta Navidad 2020 gestos concretos
La organización católica propone, en primer lugar, compartir sus bienes con los que tienen menos, dar; dar valor a lo que es realmente querido por nuestros corazones y vivir una Navidad más sencilla y austera; tomar conciencia de cuánta gente está viviendo una realidad muy diferente de la nuestra; consumir de manera justa y solidaria, teniendo en cuenta el bienestar de los demás; cultivar el encuentro y la amistad; hacer gestos libres que ayuden a mejorar la vida de los demás; y, por último, dedicar cada día un tiempo para rezar, meditar o contemplar, para aumentar la sensibilidad y vivir la realidad con mayor atención.
Fuente: Vatican News
